Citizenfour debe ser uno de esos documentales que son fundamentales para entender el mundo en que estamos inmersos hoy; un mundo hiperconectado, donde muchas veces no somos capaces de establecer una pausa respecto a nuestro entorno. A veces cuando viajo en metro observo a la gente absorta en sus celulares, cada día es menos frecuente encontrarse con gente leyendo un libro; frente a esto no hago un juicio de valor, simplemente observo en lo que nos hemos convertido.

Si nos enfocamos en el documental, este aborda particularmente los días en que Edward Snowden, por aquel tiempo empleado de la CIA, empieza en forma anónima a contactarse con Laura Poitras, la misma directora del documental. El encuentro cristaliza con una serie de mensajes anónimos que aseguraban tener información sobre los programas de vigilancia que no solo existen en Estados Unidos, sino que en varias partes del mundo.

Aproximándose al thriller, sobre todo en la construcción de la primera parte, Poitras presenta un relato desde la clandestinidad de Snowden. Cual película de David Fincher, la cámara va de a poco revelándose con la información, la cual se vuelve más clara a medida que se avanza, entendiendo así las implicancias de lo que está en juego. Aquí reside uno de los grandes logros de este documental: el posicionamiento de la cámara para entregarnos la información. Las imágenes en gran parte del documental están vaciadas de un discurso y es el propio seguimiento que hacemos del protagonista lo que nos va sumergiendo en la paranoia que significa ser perseguido por una de las mayores potencias del mundo.

Para comprender con mayor profundidad el documental lo primero que debemos dimensionar es su relación en el contexto post 11S, evento tras el cual muchas de las nociones cambiaron radicalmente en cuanto a cómo se entendía un mundo global en contra del terrorismo y cómo este hecho fundamental empezó a afectar la psicología del ciudadano estadounidense, que en pos de un mayor control y seguridad empezó paradójicamente a perder la libertad de la que tanto se había vanagloriado durante largo tiempo.

El tema central que se desprende del documental es la privacidad en el siglo XXI y cómo nos planteamos frente a ella hoy en día. En un escenario donde el acceso a internet y a la tecnología móvil se ha vuelto un gesto a escala masiva, generando prácticas exacerbadas, como publicar instantánea y sistemáticamente lo que hacemos y dejamos de hacer, Snowden nos devela que ya nada está sujeto al anonimato, que todo es susceptible de ser rastreado y, más grave aún, que no existen instancias o entidades para determinar qué información es válida de investigar. Hasta el día de hoy no existe un criterio para proteger la privacidad de ningún individuo, y esa va a ser una de las conclusiones fundamentales del testimonio de Snowden.

El riesgo que corremos por estos días es que la libertad se transforme en una dictadura donde nadie esté consciente de ella. El cambio en torno a la visión clásica del concepto de Estado en la era global constituye una señal alarmante. Una de las características que define al Estado es la delimitación a un territorio particular con una frontera claramente establecida, concepto hoy puesto en entredicho al ver cómo este puede hacerse presente en cualquier lugar y sin ningún control, graficado concretamente en la utilización de drones en operaciones de diversa índole.

Citizenfour me lleva a recordar cierta conversación sostenida hace años con un profesor, el cual sindicaba que los grandes problemas del siglo XXI iban a estar centrados en la ética. Hoy más que nunca este punto de vista se vuelve patente, inmersos en una dinámica donde las leyes y los Estados no están preparados para avizorar implicancias y consecuencias que el vertiginoso ritmo de la tecnología impone en la aldea global.

Raúl Rojas Montalbán

Comentarista: 7/10

Ficha Técnica: Citizenfour. // País: Estados Unidos. // Año: 2014. //  Duración: 114 min. // Director: Laura Poitras //  Productores: Praxis Film Berlin GmbH, Praxis Films New York. // Reparto: Julian Assange, Edward Snowden, Jacob Appelbaum, William Binney, Glenn Greenwald, Ewen MacAskill.