Los Safdie juegan con total consciencia de los límites que en algún momento tendrán que reventarles en la cara a sus personajes, quienes estiran las reglas de una realidad que no puede aguantar tanto. Eventualmente, llegarán la ley, la autoridad, el tener que hacerse cargo o, derechamente, la maldad, quizá el gran límite de todo acto ingenuo e infantil. La diferencia es que, en Diamantes en bruto, Ratner se encuentra con su límite habiendo estirado hasta el máximo las posibilidades de la realidad, al punto en que esa posibilidad mágica que es una apuesta loca y exagerada, basada totalmente en …
Leer Más