Ella se va (Emmanuelle Bercot, 2013)

Ella se va es de esas películas donde un actor, en este caso Catherine Deneuve, se apropia de un film que está hecho y pensado para su interpretación, algo así como sucedió con Paulina García en la cinta chilena Gloria.  Esta es la historia que gira en torno a la crisis de su protagonista después de que su amante la abandona por una mujer más joven, de aquí en adelante el azar se apodera de la película. Dicho quiebre emocional será el motor del itinerario de Bettie (Deneuve), el que la lleva a escapar de su vida monótona, de su madre y de su trabajo para, finalmente, encontrarse con su familia y un nuevo amante, algo así como una adolescente que escapa sin saber a dónde ir.

Lo interesante del film consiste en la manera en cómo se estructura el personaje protagónico, el que Deneuve maneja con soltura y comodidad. Bettie no tiene las cosas tan resueltas como uno podría esperar de una mujer adulta, más bien sucede todo lo contrario, parecemos estar ante una mujer que tiene, prácticamente, todas sus relaciones quebradas por lo que los conflictos van y vienen y parecen no acabarse.

La película opera mediante un tratamiento naturalista, con un ritmo que va de la mano de los propios problemas de la protagonista, junto con una música que se complementa con el estado emocional de la misma. Bettie parece deambular en busca de una respuesta que ella misma no puede alcanzar: aquí, un simple cigarrillo pareciera ser la única motivación dentro de su escape, donde la mano de una directora mujer queda claramente plasmada en la psicología del film.

Otro punto que vale destacar, y con el cual Ella se va toma valor, consiste en que los problemas de Bettie son universales y que, a pesar de estar concentrados o ejemplificados en una mujer madura, estos son perfectamente extrapolables a cualquier edad o sexo; es por esto que el film se hace universal para cualquier espectador. Lo que intenta dejarnos este acercamiento es que quizá la vida no se resuelve a cierta a edad o haciendo ciertas cosas que nos pide el entorno, sino todo lo contrario, la vida se construye en un sinfín de azares que muchas veces no vemos o no queremos ver.

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En el fondo, Ella se va es una cinta que cumple con representar una búsqueda que no tiene fin concreto y donde uno termina por involucrarse más de lo que se podría esperar, dándonos un mensaje que no está explicito, pero que se agradece no tome al espectador como alguien ingenuo. Ese mensaje está en la línea del dicho “las cosas tienen que seguir”: que la vida tiene que seguir, que los límites no los ponen los problemas, sino uno mismo y que nunca es tarde para encontrar nuevas cosas.

 

Comentarista: 6/10

Título original: Elle s’en va / / Dir y guión: Emannuelle Bercot/ Prot: Catherine Deneuve (Bettie) Nemo Shiffman (Charly), Gérard Garouste, Claude Gensac. /País: Francia/ Año: 2013/ Duración: 116 minutos.