El irlandés (2): De desaparición y de silencio

Robert De Niro se reservó el mejor papel, se escucha en su relato en off señalar lo inevitable, la historia que no se pudo impedir, la ineluctable tragedia que se despliega entre los Dogde, Plymouth y Lincoln Continental -los amados coches de los gánsters- rodando entre Pensilvania y Detroit. Lo que Frank Sheeran, el irlandés, nos muestra es el ejercicio del escepticismo, las consecuencias de la obediencia ciega, la lealtad mal entendida porque no mide sus secuelas.

Jimmy Hoffa es parte de la leyenda urbana norteamericana, con numerosas referencias en filmes y capítulos de series. Lo que lo ha hecho mítico fue su desaparición en 1975. De público conocimiento este hecho representa para Scorsese el mismo desafío que se le presentó a Griffith realizar el asesinato de Lincoln, pero a diferencia de éste escoge la forma narrativa de El ciudadano Kane (1941), contar hacia atrás. También está la magia de reunir en un mismo film a Robert De Niro, Joe Pesci y Al Pacino, además de Harvey Keitel, monstruos dentro de una misma jaula. Si tú juntas esta mirada retrospectiva con un reparto de viejos tercios tienes como resultado una historia nostálgica y reflexiva. No es el film de gánsters clásico, Scorsese ya lo hizo; en esta etapa busca más elaboración.

Si tú partes de un hecho conocido, la desaparición misteriosa de un líder sindical y creas un personaje que lo narra testimonialmente, tendrás como resultado una interiorización que solo la ficción puede entregar. Nunca se conoció cómo y quién hizo desaparecer a Hoffa, se abre allí un espacio para ficcionar que lo ocupa magistralmente este sicario que se niega a hablar.

De desapariciones y de silencios conocemos mucho. Robert De Niro se reservó el mejor papel, como lo hiciera Orson Welles en El ciudadano, y aprovechó el mismo desencanto del viejo patriarca. Se escucha en su relato en off señalar lo inevitable, la historia que no se pudo impedir, la ineluctable tragedia que se despliega entre los Dogde, Plymouth y Lincoln Continental -los amados coches de los gánsters- rodando entre Pensilvania y Detroit. Lo que Frank Sheeran, el irlandés, nos muestra es el ejercicio del escepticismo, las consecuencias de la obediencia ciega, la lealtad mal entendida porque no mide sus secuelas.

Desde allí se despliega una creíble y fascinante relación de los hechos, que en manos de Scorsese se convierte en producir escenas significantes enlazadas en múltiples historias, conectadas por el simple expediente de un viaje a una boda. Frank Sheeran junto a  Russel Bufalino, el gánster para quien trabaja, viajan con sus mujeres en un memorable trayecto que abre y cierra el relato.

El film es también la rara conjunción de cuatro grandes artistas en un momento de sus vidas en que ya está todo dicho. Cuatro celebridades: Scorsese, De Niro, Pesci y Pacino son capaces de transmitir sentimientos muy profundos, actuar con sus rostros impenetrables como los crímenes que esconden Bufalino y Sheeran. Pocas veces podemos ver esta constelación de voluntades. Pocas veces podemos sentir como la genialidad no nos abandona, que podrían transcurrir tres horas más. Pocas veces podemos rehacer una época tan controvertida  como los sesenta, que se vuelve fascinante y admirable, relatada magistralmente por esta banda. Recordar con ellos Taxi Driver (1976), Los buenos muchachos (1990), Perfume de mujer (Martin Brest, 1992), relatos inolvidables, inmortales. Gracias maestros.

 

Título original: The Irishman. Dirección: Martin Scorsese. Guion: Steven Zaillian (basado en el libro I Heard You Paint Houses de Charles Brandt). Fotografía: Rodrigo Prieto. Montaje: Thelma Schoonmaker. Música: Robbie Robertson. Reparto: Robert De Niro, Al Pacino, Joe Pesci, Harvey Keitel, Bobby Cannavale, Anna Paquin, Jack Huston, Ray Romano, Kathrine Narducci, Jesse Plemons, Domenick Lombardozzi, Stephen Graham, Jeremy Luke, Gary Basaraba, Welker White, Action Bronson, Chelsea Sheets, Kate Arrington, Sebastian Maniscalco, Stephanie Kurtzuba, Aleksa Palladino. País: Estados Unidos. Año: 2019. Duración: 210 min. Distribución: Netflix.